Legisladora habla de “oleada priista” dentro de Morena

La senadora por Morena Verónica Camino Farjat reconoció que aspira a convertirse en candidata de su partido a la gubernatura de Yucatán en los comicios de 2024, “aunque tampoco es un capricho”.

Admitió también la existencia de una oleada de priistas que se están yendo a Morena y que ella misma en las elecciones pasadas, cuando compitió por la alcaldía de Mérida, recibió el apoyo de muchos militantes de ese partido.

Respecto del exgobernador de Yucatán Rolando Zapata Bello, uno de los integrantes más influyentes del PRI local, Verónica Camino señaló que para él solo tiene mucho respeto y agradecimiento, y que si le preguntan sobre si el exmandatario es una mala persona ella siempre responderá “no, no y no”.

“Tengo aspiraciones válidas, como cualquiera”, respondió, pero en 2024 habrá una elección presidencial y surgirán muchas posibilidades de participar, y no me descarto en ninguna, “incluyendo la gubernatura, claro, aunque tampoco descarto el hecho de no competir”.

Sin embargo, precisó, “tengo todas las aspiraciones del mundo, por supuesto, pero de allí a que pasemos a caprichos… ya vimos cómo terminan las personas cuando se encaprichan con las cosas, un poquito mal”, señaló.

Alianza

Se refirió a la alianza formal e informal en Yucatán entre el PAN y el PRI —“es sabido que el senador priista Jorge Carlos Ramírez Marín mantiene una estrecha relación con el gobernador Vila Dosal”— como una de las razones por las que muchos priistas “se decantan por Morena”.

La ideología y la forma de pensar de muchos simpatizantes y militantes del PRI, su aspiración a la justicia social, la herencia de Felipe Carrillo Puerto, etcétera, “son las cosas que nos hacen irnos al lado de Morena”, afirmó.

En el caso de los priistas que se van a este partido lo hacen por convicción, “pero los del PRI se van al PAN por economía, y a las pruebas me remito”.

Hay quienes dicen que Morena es el nuevo PRI, entre otras cosas por el presunto uso de los programas sociales para crear clientela electoral y por la designación como candidatos de conocidos priistas, entre ellos la exalcaldesa de Tekax Carmen Navarrete Navarro, que tiene tres denuncias en la Fiscalía General de la República, interpuestas por la Auditoría Superior de la Federación, por presunto desvío de fondos públicos. ¿Qué opina de esto?

“Carmen está en la misma situación en la que yo estuve en un principio. A ella la invitaron a ir por el Partido Verde y por allí se fue”.

Pero lo hizo en alianza con Morena. Si este partido tuviese un poquito de cuidado diría: no voy a coaligarme con una exalcaldesa que tiene tres denuncias penales, replicaron los entrevistadores.

“¡Ay, por Dios!”, contestó la senadora. Vamos a esperar que termine el proceso y cuando se dictamine y se dé una sentencia, entonces ella deberá recibir una sanción, pero, mientras, debe prevalecer la presunción de inocencia”.

Por esta fuga de simpatizantes del PRI hacia Morena, ya muchos dicen que este partido será una especie de nuevo PRI. ¿Está de acuerdo?, se le preguntó.

“No será una especie de PRI, sino una especie de todos los partidos. En Morena toda la gente, todos los ciudadanos tienen la puerta abierta, vengan de donde vengan, no importa”.

¿En su campaña recibió apoyo de priistas o expriistas, como aquí reconoció la diputada local de Morena Jazmín Villanueva Moo? Ésta dijo que lo obtuvo específicamente de un exfuncionario del gobierno de Zapata Bello, Enrique Castillo Ruz.

“No puedo decir (que recibí apoyo) de uno, sino de montón, sobre todo de los que andan a pie, como apoyo moral y de acompañamiento, no apoyo económico. Incluso me endilgaron 500 veces que fulano o mengano estaban detrás de mí. De los priistas no recibí apoyo económico o de alguien que me haya dicho: te voy a poner una estructura, o algo así”.

Relaciones políticas

Por cierto, ¿cuál es su relación con Rolando Zapata y Víctor Caballero (secretario general de Gobierno y de Educación, además de candidato del PRI a la alcaldía de Mérida en 2018)?

“De mucho respeto, por supuesto”. En la vida hay que ser agradecidos y en este caso mi agradecimiento, en primer lugar, es para Rolando, por dejarme trabajar en la administración pública. (En su gobierno, la senadora fue directora del Centro de Prevención Social del Delito y luego diputada local).

“En el caso de Víctor Caballero, a él lo conocí hasta que entré al centro. Igual, su comportamiento conmigo fue siempre en forma profesional”.

Hay personas que quisieran que diga “muchísimas cosas más, pero lamento decir a estos biógrafos espontáneos, que no, que absolutamente no (hablaré como ellos desean)”, añadió.

Guardo con Rolando una relación de absoluto respeto. Lo único que tengo para él es agradecimiento, “y de ninguna otra forma pretendo, ni mucho menos, decir que es una mala persona. No, no, no”, dijo. “Solo hay agradecimiento, y pues ahora tengo que decir ‘es mi turno’ y soy la que está en esto”.

¿Cómo es su relación con el senador Jorge Carlos Ramírez Marín?

“Cordial y respetuosa”. Lo político no debe ser personal y lo personal tampoco debe tocar las áreas políticas. Al final, somos compañeros en la Cámara.

¿Y con Liborio Vidal? (secretario de Educación). ¿No hay una relación más antigua?

Si, también lo conozco desde hace mucho tiempo. Él es de Valladolid y nosotros de Tizimín. No tengo problemas con nadie, aunque ahora, en la parte laboral, la que tiene que ver con la administración pública, con el trato a los maestros y con sus derechos, eso es otra cosa. En la Secretaría de Educación hay serios fallos y “espero que él haya llegado (a esa dependencia) a arreglarlos y no a agrandarlos”.