Apenas unas horas después de que la autopsia encargada por la familia dictaminase que George Floyd falleció por asfixia, el forense del condado de Hennepin determinó este martes que su muerte fue un homicidio. Según el documento oficial, publicado el lunes (madrugada de ayer en España) por ‘The Washington Post’, la víctima murió de «paro cardiopulmonar que se complicó con el subyugamiento, limitación y compresión del cuello».
Con ligeros matices, las dos autopsias vienen a coincidir en el motivo del deceso. Floyd, afroamericano de 46 años, falleció mientras un policía de Minneapolis le comprimía el cuello con una pierna contra el suelo. El hombre llegó a musitar que se estaba ahogando, aunque el agente no dejó de presionar.
Desde la Unión Europa a la Liga de Fútbol Profesional o la Iglesia estadounidense, que se ha mostrado escandalizada, las críticas llueven sobre Donald Trump por la gestión de este episodio de brutalidad policial y una serie de declaraciones que no han hecho sino alimentar los disturbios en las calles. Uno de los alegatos más duros lo realizó ayer el candidato presidencial demócrata, que acusó sin ambages al jefe del Ejecutivo de transformar «el país en un campo de batalla». Joe Biden calificó la muerte de Floyd en Minneapolis de «electrochoque para nuestro país. Para todos nosotros», dijo en un discurso en Filadelfia. E insistió en que Trump ha conseguido crear un «campo de batalla dividido por los viejos resentimientos y los nuevos miedos».
«Cuando el presidente ordena desalojar a manifestantes pacíficos del porche de la casa del pueblo, la Casa Blanca, con gases lacrimógenos y granadas aturdidoras, tenemos derecho a pensar que el presidente está más preocupado por el poder que por los principios», remachó el candidato, antes de manifestar que las últimas palabras de Floyd –«no puedo respirar»– son «una llamada de atención a todo el país».
Mayweather costea el funeral
Las muestra de repulsa han llegado de todos los ámbitos. El exboxeador estadounidense Floyd Mayweather se encargará de pagar el funeral de George Floyd, que tendrá lugar el jueves, según confirmó uno de sus representantes. También la organización del Mundial de Fórmula 1 hizo una declaración donde señaló que el racismo «es un mal del que ningún deporte o sociedad es inmune».