La industria restaurantera de Yucatán aplica las medidas sanitarias y cumple los protocolos dispuestos por las autoridades de salud para que los restaurantes sean lugares seguros para los comensales y trabajadores, afirmó Roberto G. Cantón Barros, presidente local de la Canirac.

Asimismo, expuso su inconformidad con las “exorbitantes comisiones” que cobran las plataformas digitales que reparten los pedidos en los domicilios.

“Se llevan buena parte de las ganancias y no muestran solidaridad en estos momentos de crisis económica en los negocios”, lamentó.

“La Canirac puede asegurarles que los restaurantes son lugares seguros para visitar porque cumplen todas las medidas de seguridad sanitaria establecidas por la autoridad”, subrayó.

“Entre las medidas que tomamos están el uso de cubrebocas y caretas para todo el personal, tapetes desinfectantes en los accesos, medición de temperatura a clientes y colaboradores y uso de gel antibacterial“, añadió.

También mencionó el uso de menús desechables o en código QR, sana distancia entre las mesas, horarios y aforos limitados de lunes a viernes de 8 de la mañana a 10 de la noche con cupo autorizado del 25% de la capacidad en áreas de comensales.

Recordó que cierran los fines de semanas, cuando solo pueden operar con servicio a domicilio.

Como ya informó el Diario, G. Cantón Barros afirmó en días pasados que por el Covid-19 cerraron más de 4,000 unidades de negocios de la industria restaurantera en Yucatán.

En la entrevista, reiteró que la crisis sanitaria y económica generada por la pandemia afectó la afluencia de comensales, sobre todo porque hoy en día tienen permitido un aforo del 25% únicamente.

Sin embargo, ese porcentaje de ocupación irá incrementando en la medida en la que la ocupación hospitalaria en Yucatán continúe a la baja y en la medida que la sociedad recupere la confianza de salir a convivir en los espacios públicos como los restaurantes.

Las medidas sanitarias también son estrictas en la preparación de alimentos para garantizar la inocuidad, afirmó.

También garantizan una entrega segura a sus clientes por medio de repartidores de los propios negocios o el servicio de plataformas digitales.

“Las medidas sanitarias implementadas abarcan todos los espacios y todo el personal de trabajo dentro de los restaurantes”, afirmó.

“La preparación de los alimentos, sin duda, es una parte sumamente importante en el desarrollo de nuestra actividad”.

“Queremos dar certeza a todos nuestros clientes, tanto los que van a restaurantes como los que piden servicio a domicilio, de que sus alimentos son preparados con todas las normas y protocolos sanitarios con altos estándares de limpieza en el manejo de los ingredientes”.

Invitó a los clientes a que utilicen como primera opción los servicios de entrega a domicilio que presta el mismo restaurante en los casos que aplica.

“Las plataformas digitales, con sus exorbitantes comisiones, nos merman las utilidades casi en su totalidad en estos momentos tan difíciles en que esas empresas muestran poca empatía con la industria restaurantera, cuando hoy requerimos más que nunca de su apoyo”.

Opinó que la pandemia también abrió oportunidades porque antes muchos restaurantes no tenían servicio de entrega a domicilio, pero tuvieron que habilitarlo para evitar el cierre.

No tiene datos sobre el número de repartidores que trabajan para la industria restaurantera y cuánto aumentó el servicio de reparto a domicilio, pero “tendrá mucha más demanda y disponibilidad en los restaurantes después de la crisis sanitaria”.

Para los empresarios la entrega a domicilio es un área de oportunidad que piensan aprovechar.

Consideran que es uno de los factores que en cierta medida está transformando la forma de hacer negocio y ofrecer los platillos a la gente.

El líder de la Canirac no calculó un porcentaje del impacto negativo en las ventas porque varían a diario y porque no todos los negocios están abiertos al público.