Ante la pandemia por coronavirus, covid-19, los países buscan tener la solución para esta enfermedad que le ha arrebatado la vida a varias personas. Trabajan en la búsqueda de la vacuna. Ahora, Reino Unido anunció que podría empezar a implementar una vacuna contra la covid-19 en la primera mitad de 2021, si los ensayos que está realizando el Imperial College London resultan exitosos, indicó este domingo uno de los científicos que lidera la investigación.

El profesor Robin Shattock, que dirige el equipo de desarrollo de una vacuna en el Imperial College de Londres, afirmó que si la investigación marcha “realmente bien”, habría suficientes dosis disponibles para la ciudadanía de todo el Reino Unido. Advirtió, no obstante, de que “no hay certeza” acerca de que alguno de los candidatos a vacuna que se están desarrollando en la actualidad dé resultados, ya que depende del nivel de inmunidad necesaria para prevenir la infección.

“Anticipamos que, si todo va realmente bien, obtendremos una respuesta sobre si (el candidato a vacuna) funciona a principios del próximo año y hemos establecido la infraestructura para fabricar esa vacuna en todo el Reino Unido”, dijo Shattock en declaraciones a la cadena Sky.

“Entonces, suponiendo que haya fondos para comprar esa vacuna, podríamos implementarla en todo el Reino Unido en el primer semestre del próximo año”, agregó.

A finales de junio, la prestigiosa universidad empezó a probar su candidato a vacuna en el primer voluntario sano y hasta ahora lo ha inoculado en unas quince personas, un número que se incrementará para incluir a entre 200 y 300 participantes más en las próximas semanas.

Según explicó Shattock, los científicos desconocen qué nivel de inmunidad necesita una persona para prevenir su contagio, lo que hace que la posibilidad de éxito sea “difícil de predecir”. “Si solo necesita una cantidad muy pequeña de inmunidad, sospecho que la mayoría de las vacunas que se están desarrollando realmente funcionarán, pero si necesita una respuesta inmune muy fuerte o una calidad particular de respuesta inmune, veremos como se podrá descartar a algunos de estos candidatos”, indicó.

Aunque la Universidad de Oxford también está llevando a cabo el estudio de su propia vacuna, pensar que podría estar disponible para este septiembre es algo que Shattock tildó de “muy optimista”, en parte debido al descenso en el número de contagios que vive el Reino Unido.

El experto afirmó además que considera “un riesgo muy bajo” la posibilidad de que ninguna de estas vacunas funcione. “Creo que somos muy afortunados en el Reino Unido por tener dos candidatos muy fuertes, uno en el Imperial y uno en Oxford, y por lo tanto estamos bastante bien situados, pero aún no hay certeza de que ninguno de esos dos funcione”, recalcó.