Aún no se sabe si es más virulenta la nueva variante

Países de todo el mundo aplican restricciones para frenar la propagación

Naciones de todo el mundo están imponiendo restricciones para frenar la propagación de la variante Ómicron del coronavirus. Israel decidió ayer prohibir la entrada a extranjeros, la medida más radical hasta ahora.

Ya han surgido casos confirmados o sospechosos de la nueva variante en varios países europeos, pocos días después de que fuera identificada en Sudáfrica.

Holanda confirmó ayer 13 casos de la nueva variante y Australia encontró dos, los países más recientes en detectarla en viajeros que llegan desde el sur de África.

Si bien queda mucho por aprender sobre la nueva variante, a los investigadores les preocupa que pueda ser más resistente a la protección proporcionada por las vacunas y podría significar que la pandemia durará más de lo previsto.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo ayer que no está claro si Ómicron es más contagiosa o si causa enfermedad más grave

Aunque las hospitalizaciones por Covid-19 aumentan en Sudáfrica, país donde se detectó primero la variante, “ello podría ser resultado de un aumento general de los infectados, y no solo de contagios específicos con la variante Ómicron”, indicó