En el transcurso del año pasado, la localidad de Progreso experimentó un impacto negativo en la actividad turística de cruceros, su principal fuente de visitantes.
Según los datos proporcionados por la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) de Progreso, el puerto más destacado de Yucatán experimentó una disminución del 31.3% en la llegada de cruceros, pasando de 99 en 2022 a 68 en 2023. Además, se observó una reducción del 6.6% en el número de pasajeros que desembarcaron de estos cruceros, descendiendo de 252,238 en 2022 a 235,579 en el año anterior.
Las cifras más recientes, abarcando el período del 1 de enero al 22 de diciembre de 2023, revelan que Progreso enfrentó su tercer año más desafiante en cuanto a turismo de cruceros en los últimos 11 años. Este ranking se sitúa después de 2021, que registró 22 llegadas de barcos turísticos, y 2020, con 44 arribos, este último marcado por la cancelación global de cruceros debido a la pandemia de Covid-19 desde marzo. El cuarto año con peor desempeño fue 2013, con 90 arribos.
En lo que respecta a la afluencia de pasajeros de crucero, el año más desafiante para Progreso fue 2021, cuando recibió a 51,024 turistas. Le siguieron 2020, con 116,176 pasajeros; 2013, con 234,366, y 2023, con al menos 249,829.
A pesar de estos desafíos, hay indicios positivos para el año 2024, ya que se tienen programados 116 arribos de cruceros, representando un aumento significativo del 46.8% con respecto a los 79 programados para 2023. El primer barco está programado para llegar el martes 9 de enero, marcando el inicio de un nuevo año con expectativas renovadas.