Vecinos de Francisco de Montejo se oponen al cierre de una guardería que durante 23 años ha funcionado en ese fraccionamiento.

 

De acuerdo con los denunciantes, el cierre de la guardería no solo deja sin trabajo al personal sino que también afecta a los niños y a los padres, que ahora tendrán que buscar acomodo para sus hijos en otras guarderías, con la realidad de que no muchos no podrán encontrar cupo porque las guarderías siempre están saturadas.

 

En un escrito exponen su inconformidad:

 

Con tintes políticos al IMSS se le ocurrió cerrar sin previo aviso esta guardería que por 23 años ha prestado servicio a muchas madres y padres trabajadores, y ha beneficiado a la comunidad. Con los brazos cruzados obligaron a las maestras a no recibir niños, dejaron sin trabajo a maravillosas maestras y personal de cocina y limpieza, es una gran desgracia oír con voz triste a las maestras dar la noticia y rechazar la entrada de sus niños.

 

Es una gran injusticia, no se veló por el bienestar de niños que es difícil para ellos estos cambios y rutinas, es una gran injusticia que hoy muchas mamás perdieron su día de trabajo porque a alguien sin escrúpulos se le dio la gana de cerrar la guardería buscando un pretexto vano para luego beneficiar sus bolsillos.

 

Padres de familia alcen la voz, apoyemos a que no cierren la guardería.

 

Aunque en su escrito piden apoyo al gobernador Mauricio Vila y al alcalde de Mérida, Renán Barrera, y también mencionan al IMSS, la realidad es que estas guarderías dependen del Seguro Social, que es una instancia del gobierno federal que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador.