Una plaga de langostas afecta a Yucatán a pesar de los esfuerzos de fumigación

Tras mantener bajo control la población de langostas desde 2019 mediante el uso de hongos entomopatógenos, Yucatán enfrenta, por primera vez en tres años, una preocupante plaga de estos insectos. La semana pasada, las autoridades estatales lanzaron una campaña de fumigación con el objetivo de evitar que las langostas devoren los cultivos.

Durante los últimos tres años, se había logrado mantener a raya la presencia de estos insectos utilizando hongos entomopatógenos, los cuales, al introducirse en sus hábitats, generan enfermedades que resultan letales para los insectos y otros artrópodos. Sin embargo, recientemente, colonias de langostas han vuelto a aparecer en terrenos ganaderos abandonados.

Gerardo Solís, director de sanidad agropecuaria de la Secretaría de Desarrollo Rural de Yucatán, explicó que estos insectos han encontrado refugio para poner sus huevos debajo de pastizales en terrenos sin propietario, donde el personal sanitario no puede acceder. Además, el clima ha contribuido al problema, ya que el viento ha facilitado que las langostas se desplacen hacia Mérida. Esta situación ha complicado el manejo de la plaga, ya que el control biológico no puede aplicarse cerca de fuentes de agua, áreas de cultivo o viviendas.

Estos insectos suelen aparecer cíclicamente en varios países, manifestándose en México entre octubre y enero. En su migración natural, las langostas de Yucatán tienden a trasladarse al Estado vecino de Campeche. En las redes sociales, los habitantes han documentado la presencia de estos insectos sobrevolando las calles de Mérida o posados en las construcciones de la capital.